Cuando vemos la televisión y los periódicos nos damos cuenta que las noticias que se anuncian son las no comunes, las extraordinarias. Por lo general, lo que llama la atención son las cosas diferentes, no las normales.
Las personas con frecuencia planean su vida, y lo común es que en esos planes todo salga bien, los accidentes, las catástrofes naturales, las enfermedades, las traiciones, la ruina, la muerte, nada de eso forma parte de nuestros planes pero Dios lo permite para entregarnos una enseñanza y llevarnos a un nuevo nivel de maduremos.
Esos momentos en que el plan se sale del rumbo que trazamos y comienzan a suceder cosas que no estaban pautadas comenzamos a ver al cielo y a preguntarnos ¿qué es lo que pasa?.
Las cosas no debían tomar ese camino y sentimos que todo se comienza a salir de nuestro control.
Dios intervino la vida de Pablo
Después de perseguir por mucho tiempo a los seguidores de Yahshua tuvo un encuentro con él y le conoció no siendo el mismo jamás.
Dios intervino la vida de Esther
Era una niña judía, creció siendo huérfana y esclava. De acuerdo con lo que era su vida no podía aspirar grandes cosas, pero Dios (Elohim) tenía propósito con ella y la convirtió en Reina y libertadora de su pueblo.
Esas circunstancias que nos hacen llorar, que nos ofenden, quienes nos calumnian, es los que Dios está usando para hacer algo nuevo contigo y aunque nada parezca ser bueno todo obrara para bien.
