Isaías 43:16-19
“Así dice Jehová, el que abre camino en el mar, y senda en las aguas impetuosas; el que saca carro y caballo, ejército y fuerza; caen juntamente para no levantarse; fenecen, como pábilo quedan apagados. No os acordéis de las cosas pasadas, ni traigáis a memoria las cosas antiguas. He aquí que yo hago cosa nueva; pronto saldrá a luz; ¿no la conoceréis? Otra vez abriré camino en el desierto, y ríos en la soledad”.
Nuestro Padre Celestial en Su perfección es El que verdaderamente puede restaurarnos si descansamos en la hermosa promesa: “He aquí que yo hago cosa nueva”. Y es que sosteniéndonos en tan grandiosa promesa de la Palabra entendemos que no vale la pena llevar las cargas del pasado, pues el ya se ha acabado, ha transcurrido y es en toda manera inalterable.
No podemos revivirlo ni deshacerlo. No podemos descansar en la gran distancia que nos ha llevado. Si mañana se despeja, será otro día, una nueva oportunidad y un momento para mostrar nuestra fe en El Señor. Sigamos adelante, sabiendo que Dios ya habita en el futuro y promete darnos refugio en nuestro viaje hacia él, y confiando en que ya de antemano ha preparado cosa nueva, de bienestar y ganancia, de victoria y consuelo, de tranquilidad y de paz para los que en Él creen y le sirven con total fidelidad.
Oración:
Señor Tú que eres dueño de toda la eternidad, por favor ayúdame a aprender de mis errores del pasado, pero no a insistir en ellos. Por favor, ayúdame a no descansar en mis logros del pasado para no parar mi avance hacia Tu propósito, sino a utilizarlos para expandir esa obra en mí y a través de mí.