Salmos 107:28-30
“Entonces claman a Jehová en su angustia, Y los libra de sus aflicciones. Cambia la tempestad en sosiego, Y se apaciguan sus ondas. Luego se alegran, porque se apaciguaron; Y así los guía al puerto que deseaban”
Sabemos que en ocasiones las tormentas pueden acercarse a nuestras vidas. Ellas son naturales y suelen ocurrir. No obstante hay veces en las que al enfrentarte a una, observas que otra ya se acerca.
En un momento todo parece perfecto, el viento está a tu favor, el océano calmo y el sol radiante.
Pero en un instante, se acerca la lluvia como presagio a la tormenta y tu bote empieza a tambalearse en el violento mar. ¿A dónde puedes ir ahora? ¿Qué Cosas puedes hacer para sortear esas tormentas y salir victorioso? Los marineros cuentan con sus equipos de navegación, GPS, satélites y otras herramientas, pero nosotros: ¿Qué equipos podemos usar para navegar tranquilos las tormentas de la vida?
Con cualquier problema al que te enfrentes esta semana, confía en las herramientas que el Señor te ha dado para navegar a través de los acontecimientos negativos que pueden ocurrir en tu vida: El amor de tu familia, de tus amigos, la sabiduría de las escrituras y la guía misericordiosa y paternal del Señor.