Mateo 9.29
“Entonces les tocó los ojos, diciendo: Conforme a vuestra fe os sea hecho.”
Jesús de Nazaret propone tres principios de vida:
- Vive conforme a la fe.
Dijo Jesús: “Entonces les tocó los ojos, diciendo: Conforme a vuestra fe os sea hecho”. (Mateo 9.29).
Ellos reconocían su condición de ceguera pero querían salir de esas oscuridades.
Requerían visión para realizar su comisión.
La fe fue su recurso más preciado en la oscuridad de su debilidad.
Conforme a tu fe sea hecho
Tú oración es conforme a tu fe,
Tu vida es conforme a tu fe,
Tu relación con Dios es conforme a tu fe,
Tu carácter es conforme a tu fe,
Tu desempeño en la vida Cristiana es conforme a tu fe.
Decide hacer uso de la fe para entrar a dimensiones Espirituales extraordinarias, llenas de Milagros y prodigios.
- Vive conforme a tus obras.
Dijo Jesús: “Porque el Hijo del Hombre vendrá en la gloria de su Padre con sus ángeles, y entonces pagará a cada uno *conforme a sus obras”* (Mateo 16.27).
El pago viene por las obras realizadas. Porque las obras son fruto de la fe. Porque importa tanto la fe, como la unción, como las obras y las capacidades. Las obras generan una deuda que el Reino de los cielos tiene a tu favor y algunos pagos vienen antes y otros después, pero el Reino siempre paga.
¡Acciona!
Ora, escribe, predica, estudia, usa el don, forja tu carácter, escribe la canción, aprende a tocar un instrumento, haz el bien a otros, pero ¡Acciona! *Es tiempo de acción.*
- Vive conforme a tu capacidad de multiplicar.* Dijo Jesús: “A uno dio cinco talentos, y a otro dos, y a otro uno, a cada uno *)conforme a su capacidad; y luego se fue lejos”_ (Mateo 25.15)
Aumenta tus capacidades,
Multiplica la unción,
Cree más,
No te quedes enano,
Alimenta tu inteligencia,
Desarrolla nuevas habilidades,
Ve más profundo en la afinación de los dones espirituales,
Dios te dio una inversión inicial y una capacidad para Multiplicar todo lo que posees,
Enseña lo que sabes,
Siembra,
Aporta,
Instruye,
Aconseja.
*Conforme a tu capacidad para multiplicar talentos.”
El Reino descansa su obra en manos capacitadas.
Rompe la indisciplina, la irresponsabilidad, la falta de compromiso y llénate de capacidades.
Por ahí usan mucho éste cliché _”A quién Dios llama capacita”_ entonces, llegó la hora de capacitarte.
Conforme a tu fe, conforme a tus obras o conforme a tu capacidad de multiplicación serás conocido y usado.