La confianza en Dios produce milagros
Con la confianza en Dios, Moisés abrió las aguas del mar rojo.
Josué abrió las aguas del Jordán y detuvo la galaxia entera, cuando hizo un día más prolongado que los demás.
Ester salvó al pueblo judío de una muerte segura.
Daniel cerró la boca de los leones.
José se guardó para un reino.
La confianza hace que Dios pelee nuestras batallas
Ezequías estaba rodeado por los enemigos, y estos amedrentaban al pueblo
Con su poderío militar y ofendían a Dios y decían: que Dios ha podido contener nuestro poder? No le crean a Ezequías, solo los engaña.
Ezequías sabía que militarmente estaba perdido, no había manera de enfrentar a aquel ejército tan numeroso, pero él acudió a su fé, el recordó ese Dios del desierto, al Dios de las grandes batallas, al Dios que abrió el mar en dos, que detuvo el sol en Gabaón, el que detuvo las aguas del Jordán, y dijo como dijo David. Ese Dios que estuvo conmigo para vencer osos y leones, es el mismo que está conmigo hoy para vencer al gigante, así que Ezequías le dijo a su pueblo.
Con ellos está el brazo de carne, mas con nosotros esta Jehová, no temáis.
A Dios le gusta cuando confiamos en él, es ahí donde Dios es bueno, cuando nosotros entendemos que no podemos.
Dios lo hizo a su manera, puso terror entre los mismos enemigos y el pueblo de Dios prevaleció.
No se defienda UD mismo, deje que lo defienda Dios.