Lucas 22:1-6
“Estaba cerca la fiesta de los panes sin levadura, que se llama la pascua. Y los principales sacerdotes y los escribas buscaban cómo matarle; porque temían al pueblo. Y entró Satanás en Judas, por sobrenombre Iscariote, el cual era uno del número de los doce; y éste fue y habló con los principales sacerdotes, y con los jefes de la guardia, de cómo se lo entregaría. Ellos se alegraron, y convinieron en darle dinero. Y él se comprometió, y buscaba una oportunidad para entregárselo a espaldas del pueblo.”
Nos preguntamos: ¿cómo es que satanás logra entrar en el corazón de un hombre, que ha permanecido por más de tres años al lado de Jesús, que recibía cada día, las más ricas y profundas enseñanzas de parte del maestro, que era ministrado cada día directamente por el Señor?
LA PRIMERA BATALLA.
Entonces Jehová dijo a Caín: ¿Por qué te has ensañado, y por qué ha decaído tu semblante? Si bien hicieres, ¿no serás enaltecido? y si no hicieres bien, el pecado está a la puerta; con todo esto, a ti será su deseo, y tú te enseñorearás de él.
Génesis 4:6-7.
En este pasaje encontramos, la primera batalla que tiene el hombre interna en su corazón.
Dios le dice: ¿por qué te pones así? Aún no has cometido el pecado, pero tú lo puedes vencer, tú puedes decir qué No y hacer lo bueno, te puedes arrepentir, y puedes dominar al pecado, pero eso dependía de la decisión de Caín.
Así pasa con cualquiera de nosotros, podemos estar frente a los acontecimientos más bellos, pero nosotros decidimos, lo que queremos ver, todas las cosas tienen varios lados, y nosotros decidimos, que lado queremos ver.
La ofrenda que trajeron Caín i Abel, pudo haberse convertido en un acontecimiento muy lindo e histórico para Los dos hermanos, pero Caín prefirió ensañarse, en ves de rectificar su error.
LA ACTITUD DE SAÚL
Y cantaban las mujeres que danzaban, y decían: Saúl hirió a sus miles, Y David a sus diez miles. Y se enojó Saúl en gran manera, y le desagradó este dicho, y dijo: A David dieron diez miles, y a mí miles; no le falta más que el reino.
1 Samuel 18:7-8 .
Saúl prefirió enojarse y ensañarse contra David, antes que interpretar el gozo de su pueblo, él prefirió ver a David cómo a un enemigo y no como a un aliado, cómo el joven campesino y valiente que lo ayudó a salir del problema.
LA ACTITUD DE JUDAS
Y dijo uno de sus discípulos, Judas Iscariote hijo de Simón, el que le había de entregar: ¿Por qué no fue este perfume vendido por trescientos denarios, y dado a los pobres? Pero dijo esto, no porque se cuidara de los pobres, sino porque era ladrón, y teniendo la bolsa, sustraía de lo que se echaba en ella.
Juan 12:4-6.
La actitud de Judas, demuestra lo que había en su corazón, el no amaba a Jesús, ni tenía ningún tipo de consideración ni honra para con el Señor.
El consideró un desperdicio que aquella mujer, rociara aquel perfume en el cuerpo de Jesús.
EL CORAZÓN DE UN PASTOR
Me imagino el corazón del Señor ante las reiteradas actitudes de Judas, cómo pastor, luchó día a día, para que Judas reflexionara, para ver si era capaz de asimilar las enseñanzas y arrepentirse, pero no fue posible, satanás, había ganado la batalla, logró entrar al corazón de Judas, que dolor tan grande, sentiría Jesús, al saber, que ya no había nada que hacer.
El enemigo hace que la gente piense:
- Dios ama más a Abel que a mí, ahí hay favoritismo.
- David lo que quiere es quitarme el reino, tengo que matarlo.
- Ese perfume era mejor venderlo para dar de comer a los pobres.
Que tristeza se siente como pastor, cuando no se entiende el mensaje, y se prefiere murmurar.
No dejes que satanás mine tu corazón, pon la mirada en las cosas buenas que te ayudan a crecer, no en las que te secan y te apartan de la rica sabia del olivo original.