Salmo 3:3
“Mas tú, Jehová, eres escudo alrededor de mí; Mi gloria, y el que levanta mi cabeza.”
Señor amado, gracias porque estás con nosotros en todo momento y tu presencia es constante en nuestra vida, sin importar el tramo de ella que estemos recorriendo. Te agradezco también Padre porque dondequiera que vayamos, has prometido estar con nosotros y nos has dado la seguridad de que tú mismo nos acompañarás para conducir y guiar, para proteger y ayudar. Por ello antes de emprender mi camino de hoy, te encomiendo cada uno de mis pasos y acciones, de manera que ellas sean sólo para tu honra y gloria.
También te pido Señor, que me mantengas alerta ante las dificultades y los peligros que puedan postergar o traer dificultad en los pasos que dé, y aún hallando esos peligros y dificultades me mantenga siempre con una fe fortalecida en Tu poder infalible, en Tu misericordia inagotable y en Tu amor incondicional de Padre y Pastor dispuesto a dar la vida por sus ovejas.
Gracias, Señor, porque en todas las cosas podamos acudir a Ti y ofrecerte nuestras oraciones y peticiones, sabiendo que Tú escuchas y respondes a cada uno de tus hijos. En el nombre de Jesús, Amen.