Así como al inicio del día encomendamos nuestro camino a nuestro Padre Celestial, es importante que antes de acostarnos pongamos en manos del Eterno nuestro descanso, pues tal como lo dice la escritura el vigila y guarda nuestro sueño.
En la biblia existen un sin número de versículos que nos animan a descansar en paz, con la confianza de que nuestro Señor no se aparta de nosotros y nos dará un maravilloso amanecer.
Oración:
Salmos 4:8
“En paz me acostaré, y asimismo dormiré; Porque solo tú, Jehová, me haces vivir confiado”.
Gracias Señor mi Dios por este nuevo tiempo para descansar, gracias por todas las victorias que me entregaste en este día y otorgarme la oportunidad de experimentar tus maravillas. Te pido de todo corazón que me des paz para reposar, recuperar fuerzas y renovar mi pensamiento, guarda mi sueño y defiéndeme de los que me acosan mientras duermo. Yo confió en ti y en tu fidelidad de que no me dejaras ni a derecha ni a izquierda. Amén.