1 Corintios 15:10
“Pero por la gracia de Dios soy lo que soy”
Su gracia es la respuesta perfecta a nuestras necesidades diarias.
Dios es grande; nosotros no necesitamos serlo…
¿Hay circunstancias en tu vida con las que crees que no puedes lidiar? Clama por la gracia del Señor, y confía en tu Padre en el Cielo. No trates de dirigir la gracia de Dios de acuerdo con lo que tú puedas pensar que necesita hacerse; más bien, pídele que haga lo que Él sabe que es lo mejor para ti.
¿Te encuentras en circunstancias que quisieras poder cambiar aun cuando no tienes poder sobre éstas? ¿Tu corazón está quebrantado, sin posibilidad aparente de ser restaurado? ¿La vida es demasiado difícil, y te sientes impotente?
Éstas son ocasiones en las que se necesita la gracia. La gracia te lleva adonde tú quieres estar, pero no puedes llegar solo. Observa la gracia de Dios en tu vida y dale las gracias por suplir lo que necesitas de la vida.