Salmos 127.1
“Si Yahveh no guardare la ciudad, en vano vela la guarda.”
El hombre constantemente se preocupa por su seguridad, las medidas que toma en casa van desde un perro feroz que alerte sobre cualquier intruso, pasando por alamas dentro de las casas, hasta guarda espalda personal.
Y es que la inseguridad esta en todos lados y llega cuando menos se espera, sin embargo la palabra del Eterno dice que cualquier esfuerzo es en vano, sino lo ponemos a El cómo nuestro principal escudo.
Dios quiere que nos demos cuenta que mas allá de cualquier medida de seguridad que tomemos, es él quien guarda el camino del hombre, sus pasos, su vida y sus pensamientos. Dios puede librar de la muerte, del peligro y del mal a cualquier persona que carezca de medidas de seguridad, porque su seguridad está en Dios.
Por eso es tiempo que pongamos atención a la necesidad de preocuparnos por nuestra seguridad espiritual y elevemos esta oración:
Oración:
Amado Dios, mi Rey y Señor, gracias te doy porque tu palabra aclara mis vista, bendito sea tu nombre y bendito tu Santo Espíritu. Quiero ponerme hoy en tus manos, para que me guardes y me libres del mal. Tómame de la mano y dame visión de águila para ver cuando venga el peligro y huir de él.
Aparta de mi camino bendito Dios a toda persona que venga en mi contra y dame discernimiento para detectar cualquier trampa del enemigo. Te reconozco como mi escudo, mi protector y mi resguardo. Amén.