Nunca será lo mismo comenzar un proyecto con Dios, que sin él. Por eso todo lo que emprendamos y hagamos debemos ponerlo en sus sabias manos para que su bendición nos guíe por el camino de la victoria.
Oración:
Señor, Tú eres el Dios de todo cuanto existe y por ende de las oportunidades. Cada día, pones en mi camino oportunidades para hacer el bien. Abre mis ojos, por favor, para que no me las pierda. Oro pidiendo que tenga el valor de responder a las oportunidades que vienen de ti. Y enséñame, por favor, cómo puedo ser de bendición a los demás al ponerme a disposición para hacer tu obra. Espero con anticipación, Señor, lo que pondrás delante de mí hoy.