Vivir en paz y experimentarla en momentos de tribulación es muy importante para poder encontrar un equilibrio que nos permita tener pensamientos correctos y tomar buenas decisiones.
Pero la paz que proviene de Dios es la que puede brindarnos eso, una paz sobrenatural que difícilmente encontraremos en otro lugar, esa paz la encontramos por medio de su palabra en la lectura diaria de la escritura.
2 Tesalonicenses 3:16
Y el mismo Señor de paz os dé siempre paz en toda manera. El Señor sea con todos vosotros.
Filipenses 4:6
Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias.
Isaías 26:3
Tú guardarás en completa paz a aquel cuyo pensamiento en ti persevera; porque en ti ha confiado.
Romanos 12:8
el que exhorta, en la exhortación; el que reparte, con liberalidad; el que preside, con solicitud; el que hace misericordia, con alegría.
Salmos 34:14
Apártate del mal, y haz el bien; Busca la paz, y síguela.
Santiago 3:18
Y el fruto de justicia se siembra en paz para aquellos que hacen la paz.
1 Pedro 5:7
echando toda vuestra ansiedad sobre él, porque él tiene cuidado de vosotros.
1 Pedro 3:11
Apártese del mal, y haga el bien; busque la paz, y sígala.
Isaías 12:2
He aquí Dios es salvación mía; me aseguraré y no temeré; porque mi fortaleza y mi canción es JAH Jehová, quien ha sido salvación para mí.
1 Corintios 14:33
pues Dios no es Dios de confusión, sino de paz. Como en todas las iglesias de los santos,
Filipenses 4:9
Lo que aprendisteis y recibisteis y oísteis y visteis en mí, esto haced; y el Dios de paz estará con vosotros.
Romanos 15:33
Y el Dios de paz sea con todos vosotros. Amén.
Gálatas 1:3
Gracia y paz sean a vosotros, de Dios el Padre y de nuestro Señor Yahshua.