Lucas 22:8-9
“Y Yahshua envió a Pedro y a Juan, diciendo: Id, preparadnos la pascua para que la comamos. Ellos le dijeron: ¿Dónde quieres que la preparemos?”
No hay duda alguna que Yahshúa vino al mundo a mostrarnos el ejemplo a seguir; nos enseñó el amor al prójimo pero también el amor a la Toráh, la fórmula perfecta para cumplir con los mandamientos que dan vida, con su amor nos enseñó como cumplirla y nos instruyó en la celebración de las Santas Convocaciones.
El instruyó perfectamente a sus discípulos, incluso a aquél que habría de traicionarlo, (pero no era más que el instrumento para que se cumpliera lo que ya estaba escrito, Su muerte y resurrección, la gran obra redentora por amor a nosotros), no sin antes dejar el legado del Padre Eterno y cumplir con el propósito establecido por YAHWEH.
Antes de lo cual les enseñó a sus discípulos obediencia, sólo bastó que YAHSHÚA diera la instrucción para que Pedro y Juan obedecieran sin cuestionar, ellos solo preguntaron ¿dónde quieres que lo preparemos? Sin poner excusas ni pretextos, porque solo cuando se ama de verdad procuras complacer y obedecer lo que EL ser amado demanda.