Todos en algún momento hemos experimentado el poder y las bendiciones de nuestro creador. El desea que sepamos que su mano no se ha acortado, al contrario permanece dispuesta para ayudar a todos aquellos que clamen por su nombre y pidan su ayuda.
Dios es bueno y su misericordia es para siempre, todo lo que le pidas conforme a su voluntad hará y no tardara en mostrarte su amor. Solo sigue creyendo y esperando su momento perfecto.
Uno de los errores que a veces cometemos es echar por tierra la fe en Dios dándole lugar a la duda y con ella a la frustración, Dios está observando cada decisión, cada paso, así que no les el gusto al enemigo, Dios tiene la última palabra y siempre está a favor de la justicia y el bendecir a sus hijos.
Amen. bendiciones
Amen