Proverbios 28:1
“Huye el impío sin que nadie lo persiga; mas el justo está confiado como un león.”
Amados, observen el hecho de que las personas que realizan actos indebidos, aquellos que fallan a los principios de rectitud, actuando de forma ilícita, escogen una vida llena de dificultades, presiones, persecuciones y sobresaltos volviéndose esclavos de estos actos pecaminosos que los llevaron a ese punto, es decir el pecado va creciendo como una bola de nieve a través de una pendiente.
El versículo en estudio señala la importancia de mantener una vida con fiel observancia a los mandatos bíblicos para ser acreedores de la paz que se produce a partir de la confianza de haber realizado las actividades bien, ya que si preferimos actuar fuera de los mandatos establecidos, de manera desobediente estaremos andando en mal camino, por el error, la angustia y otras emociones dañinas, las cuales Dios no desea que vivamos, por lo cual nos exhorta a actuar de manera adecuada y conforme a sus prerrogativas para obtener salvación eterna.