Santiago 5:15
“Y la oración de fe salvará al enfermo, y el Señor lo levantará; y si hubiere cometido pecados, le serán perdonados.”
Amados, él señor tiene un plan, un tiempo, todo lo puede, todo lo consigue; mientras nosotros tenemos una esperanza y una gran fe, ahora en todo tiempo debemos demostrar al padre que estamos esperando un resultado de él y que confiamos en que ello va a ocurrir, orando es que demostramos este hecho al señor. De allí la importancia de tener continuidad en la oración.
En los versículos bajo estudio, se revela el poder sanador, liberado, de perdón que tiene la oración, constituyendo una hermosa dadiva que con nuestro prójimo debemos compartir para mayor eficacia, ya que ello generara grandes resultados por el hecho de que todos hemos sido justificados por el precio que pago Yahshua en la Cruz. Por tanto, oremos con fe unos por los otros, confesemos nuestros pecados, dejemos de cometerlos y la sanación se producirá.