Génesis 2:7
Entonces Yahweh Dios formó al hombre del polvo de la tierra, y sopló en su nariz aliento de vida, y fue el hombre un ser viviente.
Señor, Gracias por el nuevo privilegio de disfrutar Tu creación, que me regalas a través de este nuevo día. Sé que hoy llenarás de luz mi jornada, con Tu compañía. Así como hablaste y trajiste vida a este mundo por medio de Tu Palabra, ayúdame a también ser instrumento de vida, mediante mis acciones y palabras en la vida de los que me rodean, para glorificarte y ser siempre un hacedor de Tu voluntad.
Señor, marca delante de mi Tus huellas, de manera que pueda siempre avanzar por la gloria de Tus pasos. A pesar de las situaciones inesperadas que lleguen a mi vida, fortalece mi espíritu de determinación y coraje, para perseverar y vencer, sabiendo siempre que cada una de mis decisiones, están bendecidas por Tu cuidado y amor. Amén.