Es con aquellos que deciden hacer pacto con Él y tienen la humildad de aceptar sus enseñanzas poniéndolas por obra, esos son quienes reciben las bendiciones de conocer su nombre tal como lo hicieron nuestros padres (Rut 1:16). El hebreo tiene una semántica original, divina, es tan poderoso que con tan solo 22 letras Yahweh creó todo lo que existe y un día será restaurado el diseño original. El Eterno nos ha distinguido colocando su nombre en nuestras frentes, hemos sido apartados, santificados para nuestro Dios.
Sofonías 3.19
“He aquí, en aquel tiempo yo apremiaré a todos tus opresores; y salvaré a la que cojea, y recogeré la descarriada; y os pondré por alabanza y por renombre en toda la tierra.”
No dudemos de lo que YHWH ha prometido, debemos seguir adelante con valentía sin importar el panorama que nos rodea pues Él ha prometido bendecirnos. Para recibir la revelación de su nombre debemos tener humildad
Amarle a Él es cumplir sus mandamientos con todo nuestro corazón, confiando siempre en que cumplirá sus promesas y teniendo temor y reverencia al ministrar su Nombre Santo para así poder recibir las bondades, beneficios y bendiciones de conocer y proclamar su nombre.