Daniel 10.10-19
Daniel tuvo una visita celestial, ángeles del cielo hablaron con él.
Daniel dispuso en su corazón para humillarse en ayuno a Dios y el resultado fue un encuentro con lo sobrenatural. El sentido del ayuno era acelerar la respuesta de Dios sobre el tiempo profético que se debía vivir para ese tiempo y que aún no había llegado.
Así mismo a veces hay bendiciones en nuestras vidas que están atrasadas, prosperidad, crecimiento espiritual que siguen sin suceder. Quizás el tiempo y los años han pasado y no han traído nada consigo aun caminando de la mano del Eterno.
Pero Daniel además de reconocer el atraso que había, quiso hacer algo para que se cumpliese la profecía, así mismo hay profecías en nuestras vidas que están en el aire hasta que nos determinemos a hacer algo por arrebatarlas y hacerlas reales para nuestras vidas.
Hay cosas en nuestras vidas que no vendrán solas, Dios las entregara pero será necesario mostrar interés, anhelarlas para verlas con nuestros ojos.
Daniel necesitando ver el cumplimiento entro en ayuno y oración, arrepintiéndose delante de él buscándole de corazón, como resultado el Ángel Gabriel trae respuesta a su vida de parte del Dios vivo.
Dios no ignorara nuestros corazones humillados y nuestra hambre y sed de su justicia, solo debemos buscarle con el corazón dispuesto y la actitud correcta para recibir esa gran bendición.
Más artículos relacionados
Recupera lo que una vez tuviste