2 reyes 5.27
“Por tanto, la lepra de Naamán se te pegará a ti y a tu descendencia para siempre. Y salió de delante de él leproso, blanco como la nieve.”
Proverbios 26.2
“Como el gorrión en su vagar, y como la golondrina en su vuelo, así la maldición nunca vendrá sin causa.”
Cuando el hombre peco sobre la tierra Dios dijo “Por ti la tierra será maldita” desde ese momento cayo una maldición de esterilidad sobre la tierra.
Esta historia que hemos leído nos deja claro la existencia de maldiciones generacionales, el pecado le da acceso al enemigo para entrar a nuestras vidas, por eso la escritura dice “No le den lugar al diablo”.
Muchas veces hombres de Dios no prosperan en diferentes áreas de su vida por causa de maldiciones generacionales.
Muchas personas no se explican por qué suceden cosas en sus vidas o en sus casas. Nuestros padres cometieron pecados que trajeron maldiciones sobre nosotros.
Cuando venimos a Yahshua somos nuevas creaturas, pero se requiere de un proceso para perfeccionar las cosas.
Hay muchos testimonios que dejan evidencia de las maldiciones generacionales, a pesar de que las generaciones siguientes no tienen culpa de los pecados de sus padres cargan con maldiciones hasta llegar al Dios vivo para romperla.
La mentira, el adulterio, el ocultismo, la avaricia, la idolatría y muchos otros pecados son la raíz de todo mal.
Muchos de nosotros venimos de familias que le abrieron puertas al enemigo y solo recurriendo al poder de Dios podremos acabar con ellas quien las romperá con su poderosa mano.