1 Crónicas 28:9
“Si tú le buscares, lo hallarás”
Necesitamos de Dios, y a Dios podemos hallarlo si le buscamos, porque jamás se negará a ser hallado por quienes personalmente buscasen su rostro. Y esto acaecerá, no si tú lo mereces o sabes ganarte su favor, más si le “buscares”. Quienes ya conocen al Señor deben seguir buscando su rostro por medio de la oración, sirviéndole más diligentemente, y con gratitud más sincera. A ellos nunca rehusará ni su favor, ni su presencia.
Cuando le halles, habrás hallado vida, perdón, santificación y gloria. ¿Por qué no le buscas continuamente, ya que tu trabajo no será vano? Querido amigo, busca al Señor ahora mismo. Este es el lugar y el tiempo favorable. Aquí tienes el testimonio de David a su hijo Salomón, y tal es el testimonio del autor. Créelo y hazlo así, porque grande es el galardón.
Recuérdate a ti mismo: Hoy es un buen día para Buscarlo y de seguro que lo hallaré.
Mateo 7.7-11
“Pedid, y se os dará; buscad, y hallaréis; llamad, y se os abrirá. Porque cualquiera que pide, recibe; y el que busca, halla; y al que llama, se abrirá. ¿Qué hombre hay de vosotros, á quien si su hijo pidiere pan, le dará una piedra?, ¿Y si le pidiere un pez, le dará una serpiente? pues si vosotros, siendo malos, sabéis dar buenas dádivas á vuestros hijos, ¿cuánto más vuestro Padre que está en los cielos, dará buenas cosas á los que le piden?”