Hebreos 13.8-9
“Yahshua es el mismo ayer, y hoy, y por los siglos. No os dejéis llevar de doctrinas diversas y extrañas; porque buena cosa es afirmar el corazón con la gracia, no con viandas, que nunca aprovecharon a los que se han ocupado de ellas.”
Hoy en día igual que en épocas pasadas El Eterno está rompiendo estructuras, derribando altares y gigantes así como lo hizo con Goliat, quitando oprobios, soberbia, orgullo.
Así como Yahweh restauro el pueblo de Juda e hizo que obedecieran y cumplieran el pacto descrito en la Toráh así también hará con nosotros hoy en nuestra nación y no se volverán a desviar, como solían hacer con algunos Reyes en oportunidades, que el pueblo retrocedía al pecado y por eso sufrieron consecuencias.
El rey fue quitado porque ellos no fueron del todo fieles a los pactos y arreglos que el Eterno hizo.
Dios sigue buscando a su remanente que se encuentren obedeciendo sus mandamientos, sus pactos y santas convocatorias, recordemos que, como hijos del Altísimo vamos a pasar por pruebas y circunstancias en las que la obediencia y fidelidad a Yahshua al final serán recompensadas para aquellos que guardan sus pactos y mandamientos, pero también su justicia para con aquellos que deliberadamente pecan contra Su Santo Nombre.