El carácter de algunas personas es tan cerrado que les cuesta manifestar la necesidad de requerir ayuda, a veces a pesar de sentirse muy cargados y realmente agobiados prefieren llevar consigo todo el problema con tal de no decir “No puedo solo”.
Muchas veces Dios permite esos procesos difíciles porque sabe que quebrantaran el orgullo en las personas y les permitirá dar un paso hacia el reconocimiento de necesitar apoyo.
Debido al agotamiento las personas son incapaces de ver la salida a pesar de estar muy cerca de ella, es por eso la importancia de entregar las cargas al Eterno.
Salmos 55.22
“Echa sobre Yahweh tu carga, y él te sustentará; no dejará para siempre caído al justo.”
Es por ello que la palabra del Eterno dice que todas las cosas nos ayudan a bien, incluso las que creemos más difíciles, pues a través de ellas podemos despojarnos del pecado. El orgullo y la soberbia son pecado y pero cuando clamamos al Eterno pidiendo su ayuda sobrenatural estados dejando eso que nos asedia a un lado.
Proverbios 16.18-19
“Antes del quebrantamiento es la soberbia, y antes de la caída la altivez de espíritu. Mejor es humillar el espíritu con los humildes que repartir despojos con los soberbios.”