2 Samuel 22.29
“Tú eres mi lámpara, oh Yahweh; mi Dios alumbrará mis tinieblas.”
Quizás muchos desconocen que al anochecer, la oscuridad no se siempre mantiene el mismo grado de intensidad, pasada la media noche pocos minutos antes de ver el alba, la noche se torna más oscura.
Podemos comparar este hecho con esas cosas que ocurren en nuestro día a día y que parecen haber llegado para oscurecer cada uno de ellos. Lo maravilloso del fenómeno es que detrás de tanta oscuridad aguarda un maravilloso amanecer lleno de luz y resplandor.
Esas cosas que hoy parecen poner tu vida oscura y que te han quitado las ganar de seguir esforzándote no lo que parece.
Permanece creyendo, perfecciona aun más la paciencia porque la naturaleza y Dios anuncian que pronto amanecerá
Romanos 13.12
“La noche está avanzada, y se acerca el día. Desechemos, pues, las obras de las tinieblas, y vistámonos las armas de la luz.”
Hoy el Eterno nos pide solo un poco más, esos últimos minutos antes del amanecer llenaran nuestro día de Gloria si no nos rendimos y decidimos continuar adelante.
Ni la más densa tiniebla puede permanecer cuando decidimos caminar al lado del Dios Eterno, todas las cosas fueron creadas por él y en su diseño perfecto a sus hijos les otorga las victorias para que en ellas su nombre sea glorificado.