Efesios 6.18 “orando en todo tiempo con toda oración y súplica en el Espíritu, y velando en ello con toda perseverancia y súplica por todos los santos”.
Un soldado que sale a la batalla sin armadura y sin espada queda expuesto ante los ataques de su adversario. Por tal motivo, el hombre y la mujer de Dios deben estar preparados, orando en todo tiempo.
En este versículo se declara que la oración no solo debe ser en todo tiempo, sino también debe ser “por todos”, Jesús oró por sus discípulos y también por nosotros (Juan 17:20). Quien ora en todo tiempo, llega a ser una persona espiritual y cubre todas las áreas de su vida.
Yahshua ganó su batalla en Getzemani. Momentos antes de ir a la cruz Jesucristo sintió temor, pero lo que le dio la victoria en el cumplimiento de su propósito fue la oración.
Debemos entender que es el Espíritu Santo de Dios quien hace la obra, solo tenemos que disponer nuestros corazones a la humildad y la obediencia para obtener la respuesta de Dios, reconociendo y honrando a nuestras autoridades. Es necesario mantener una vida de oración en todo tiempo y levantar vallado para nuestra familia, para nuestro país y para todos mediante la oración.